sábado, 28 de febrero de 2009

Un libro corto, de los que gustan.

Hay libros de pocas páginas cuya lectura resulta muy agradable, y muchas veces me he preguntado el porqué. No son de esos "novelones" que duran semanas, en los que acabas conociendo muy bien a los personajes, o en los que las historias que relatan se van ensamblando con datos, perfiles, descripciones... No, todo eso apenas cabe en los libros a los que me refiero.

Me refiero a libros de poco más de cien páginas, que relatan una historia a menudo sencilla, y que con pocos trazos y pocas descripciones te meten directamente en un ambiente.

Quizá el modo de escribir y la sencillez, al menos aparente, del relato, hacen que se conecte pronto y enganchen con facilidad.

He leido unos cuantos de éstos, pero el último -que ha dado lugar a esta reflexión- es "Reducción de condena" de Patrick Modiano, del que no había leido nada.

¿A quién le pueden interesar unos recuerdos de infancia de un chico francés cuyos padres trabajaban en un circo y en algún otro negocio "poco claro"?
Pues pienso que tú mismo te puedes interesar si empiezas a leer el libro. Frases cortas y buena técnica. Interesante.

2 comentarios:

Anónimo dijo...

estoy en ello.Te contaré

Loren dijo...

Modiano escribe muy bien. Tiene una prosa elegante, sútil, aunque reconozco que En el café de la juventud perdida no me gustó demasiado. Tengo en la mesilla Dora Bruder que dicen es la mejor de él. Ya te contaré si la leo.

Un saludo.