El título puede desconcertar un poco, pero "El curioso incidente del perro a medianoche" me gustó sobre todo porque me pareció maravillosa la forma de meterse en la cabeza de un niño autista para ver el mundo desde su óptica.

Es un libro a la vez simpático y duro, tierno y cruel... como la vida misma. Es también una novela de misterio, muy bien escrita por Mark Haddon.
Un acontecimiento interpretado por el crío protagonista como un asesinato, sirve para asomarnos a la construcción de todo un mundo interior, que se acerca mucho a la realidad; y también para ver las relaciones, a veces difíciles, que se establecen entre los niños con esa anomalía y las personas que les rodean y les quieren.
El cariño, la paciencia, la rabia, la impotencia, la comprensión, la relación con los educadores, los compañeros y sobre todo con la familia... todo eso va apareciendo en el libro.
Casi todos conocemos algún caso más o menos cercano de personas que se encuentran en una situación similar (bastante habitual por otra parte), y pienso que este libro además de divertir puede ayudar a quien lo lea.